Las personas con cáncer han sido de los mayormente afectados con la pandemia de COVID, ya que los encierros, la enfermedad del personal de salud y una reducción en los diagnósticos han dejado a muchos sin saber sobre su enfermedad. Ahora, un nuevo análisis de sangre podría ayudar a compensar algunas de estas consecuencias, revelando simultáneamente si alguien tiene cáncer y si se ha propagado.
Esta prueba innovadora se
publicó en Clinical Cancer Research y proviene de la Universidad de Oxford, Reino Unido.
Es la primera vez que una prueba basada en sangre ha podido detectar metástasis (propagación de células cancerosas), lo que podría marcar la diferencia al brindar a los médicos la información que necesitan para establecer qué pacientes requieren tratamiento con mayor urgencia.
Los síntomas "inespecíficos" son parte de la razón por la que muchos cánceres son tan mortales, ya que pueden pasar desapercibidos hasta que alcanzan una etapa avanzada y se propagan a otras partes del cuerpo. La metástasis tiene una gran influencia en los resultados de los pacientes, por lo que identificar los cánceres que ya se han propagado rápidamente puede ayudar a los médicos a priorizar la atención de sus pacientes.
La nueva prueba también viene con la ventaja de ser mínimamente invasiva y económica, dos palabras que son música para los oídos de la comunidad médica y los pacientes.
En el estudio realizado para esta prueba se analizaron muestras de sangre de 300 pacientes cuyos síntomas eran "vagos" pero potencialmente indicativos de cáncer, como pérdida de peso y fatiga. Luego analizaron las muestras usando tecnología de metabolómica de RMN, que usa campos magnéticos altos y ondas de radio para perfilar los niveles de sustancias químicas naturales (metabolitos) en la sangre.
"Las células cancerosas tienen huellas dactilares metabolómicas únicas debido a sus diferentes procesos metabólicos", dijo el Dr. James Larkin en un comunicado de la Universidad de Oxford. "Recién ahora estamos comenzando a comprender cómo los metabolitos producidos por los tumores pueden usarse como biomarcadores para detectar con precisión el cáncer".
Con esta técnica, los investigadores pudieron detectar correctamente a 19 de cada 20 pacientes con cáncer. De ellos, la prueba también pudo identificar la enfermedad metastásica con una precisión general del 94 %. Esto fue independientemente del tipo de cáncer primario, lo que demuestra que la prueba podría ser una primera vía de investigación fundamental para los pacientes con síntomas inespecíficos que no apuntan a un órgano específico.
"El objetivo es producir una prueba para el cáncer que esté al alcance de todos", dijo la investigadora principal, la Dra. Fay Probert. "Prevemos que el análisis metabolómico de la sangre permitirá una clasificación precisa, oportuna y rentable de los pacientes con sospecha de cáncer y podría permitir una mejor priorización de los pacientes en función de la información temprana adicional que esta prueba proporciona sobre su enfermedad".
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